Seremi Raúl Martínez indicó que la partida nacional muestra un aumento del 3,7% respecto del 2021, luciendo drásticamente el déficit fiscal estructural y buscando invertir fuertemente en el desarrollo inclusivo y sustentable del país.

Un aumento del 3,7 por ciento respecto del 2021 es el aumento trazado por el Ejecutivo para el Presupuesto de la nación 2022, alcanzando así la suma de 82.135 millones de dólares. Lo anterior busca el desarrollo del país de manera inclusiva y sostenible priorizando las principales necesidades de la ciudadanía como salud, empleo y seguridad; y sostenible. De esta manera, se busca fortalecer la inversión, el crecimiento, la recuperación de los equilibrios fiscales y macroeconómicos, junto con la protección del medio ambiente y la naturaleza.

 

Así lo explicó el seremi Raúl Martínez, añadiendo que esta propuesta significa una reducción del déficit fiscal estructural de 11,5 a un 3,9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), siendo un avance concreto en la recuperación de los equilibrios fiscales, la estabilización de la deuda pública y el fortalecimiento de los pilares del crecimiento y desarrollo de nuestro país.

 

‘Los principales desafíos de la partida presupuestaria son mantener la Red de Protección Social, recuperar los equilibrios fiscales y macroeconómicos y continuar por la ruta de la creación de trabajos, emprendimientos, crecimiento económico y desarrollo humano. Además, habrá recursos de libre disposición para el próximo gobierno por un monto cercano a los 700 millones de dólares’, indicó.

 

Así entonces, el 2022 buscará potenciar la inversión creciendo un 8,1 por ciento, frente a un gasto corriente que aumenta un 2,8 por ciento, en comparación con la Ley de Presupuesto aprobada el 2021. Este crecimiento se concentra principalmente en vivienda, obras públicas e infraestructura deportiva, para los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos que se celebrarán en Chile en 2023.

 

La autoridad regional detalló que los 10 ejes prioritarios del presupuesto 2022 son salud y vida; reactivación económica y creación de empleos; orden público y seguridad ciudadana; mejor niñez, adulto mejor; igualdad de derecho y protección a las mujeres; educación de calidad y ciencia para el futuro; regiones empoderadas; sequía, agua y riego; y crisis climática.